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Sin título porque no tengo ganas de alardear.
Sólo creía que estaba, pero sé que siempre me tengo a mí para meditar. Me tengo a mí para pensar y cavilar sobre lo sucedido, sobre lo que puede pasar.
Casualidades, no.
Causalidades, tal vez.
Destino, quién sabe.
Deseo escribir hasta que no me salgan mas ideas. Como si dijera que Franco está tocando la batería tan fuerte que no puedo pensar, las ideas que tenía se van para el cuarto donde suena el ruidoso instrumento y yo me quedo sólo con mi teclado y esta pantalla iluminada que me pide palabras. Siempre me pide palabras.
Se puede escribir con la panza vacía, pero no se puede escribir con la mente vacía.
Hoy me di cuenta que todo se puede arreglar si uno da lo mejor de sí.

Y esto es para vos:

Iluminaste mis días con tu sonrisa, le diste sentido a cosas que antes no veía y que realmente veo ahora.
Has sido, eres y serás el único faro que ilumina la oscuridad de mi alma, el amor más fuerte que nadie conoció. Ese es nuestro amor, y será siempre así. Nos encargaremos de ello.




Chao